El cuarto examen de la oposición es, sin duda, una de las fases más exigentes. En esta prueba, no solo se valora el conocimiento técnico, sino también tu capacidad para comunicar, razonar con claridad y mantener la calma ante el tribunal. Por eso, mi enfoque en la preparación va mucho más allá del simple estudio de temas.
Conoce bien el formato: lo entrenamos desde el principio
Esta prueba consiste en una exposición oral de cuatro temas, uno de cada uno de los siguientes bloques:
- Catastro
- Derecho Financiero y Tributario
- Economía, Economía Urbana y Dirección Pública
- Hacienda Pública
Dispondrás de un máximo de 15 minutos para elaborar un guión, únicamente con el programa oficial delante y siempre en presencia del tribunal. Después, tendrás entre 45 y 60 minutos para exponer los temas.
Durante nuestras sesiones, trabajamos este formato desde el primer momento para que cuando llegue el día del examen, sientas que es solo un simulacro más.
Te ayudo a gestionar el tiempo y estructurar el discurso
Una de las claves es organizar bien el tiempo: ni correr ni perderse en detalles. En nuestras sesiones, hacemos prácticas cronometradas y te enseño a construir una estructura sólida para cada tema: introducción, desarrollo por bloques y cierre claro.
Además, entrenamos el guión previo: cómo aprovechar esos 15 minutos para ordenar las ideas con lógica y seguridad.
Exposición sin apoyos: todo sale de ti
No podrás usar esquemas, presentaciones ni ningún tipo de apoyo visual. Por eso, durante la preparación te ayudo a interiorizar una narrativa técnica clara y segura, sin depender de nada más que de tu conocimiento y tu capacidad de expresión.
Trabajamos tu expresión oral (sí, hablar también se entrena)
Practicarás en voz alta, te grabarás, te corregiré el tono, el ritmo, la claridad. Aprenderás a hablar como lo que vas a ser: un profesional solvente y seguro ante un tribunal técnico. Y todo sin caer en tecnicismos innecesarios que entorpezcan tu mensaje.
Entrenamos también la parte emocional
Porque los nervios existen y hay que gestionarlos. Te enseño técnicas de visualización positiva y, sobre todo, hacemos simulacros reales con feedback, que es lo que más se parece a lo que vivirás en el examen.
Simulacros, simulacros, simulacros
En esta parte de la oposición, no hay atajos. La práctica marca la diferencia. Por eso, hacemos simulacros periódicos, analizamos errores, corregimos discurso, ajustamos tiempos y reforzamos los puntos débiles.
Si ya has llegado hasta aquí, sabes lo que cuesta. Mi trabajo es que lo termines con seguridad, confianza y resultados.